Transit IX - Esperanza en Acción

 

 

• Información del taller
• Formulario de solicitud (fecha límite: 12 de marzo)
• Programa completo e información

Introdução de Julia Varley

En 2006, las actrices del grupo Yuyachkani me invitaron a un festival en Lima. Un día, llevaron a todos los invitados al monumento conmemorativo El ojo que llora de Lika Mutal, un laberinto que conduce a una escultura de piedra en el centro.  En cuanto entré al laberinto, mire hacia abajo: al lado del camino, había miles de piedras ordenadas, una por cada una de las víctimas de esa guerra que duró veinte años, entre el Ejército peruano y Sendero Luminoso. Algunas de las piedras revelaban el nombre y la fecha de nacimiento, desaparición y muerte de la persona. Mirando hacia abajo, recordé todas las otras guerras y masacres, me embargó la angustia y la impotencia. Buscando consuelo, miré durante bastante tiempo, la escultura, lavada por una onda continua de agua,  que representa las lágrimas de la Pachamama (Madre Tierra). Luego caminé todo el camino de regreso. Las piedras estaban en la dirección opuesta y yo ya no podia leer las inscripciones. Automáticamente,  levanté mis ojos y la cabeza, mi cuerpo erguido recobró la energía. La simple obligación de poner un pie enfrente del otro, cambió mi actitud. Entonces entendí, que lo que debemos y tenemos que hacer, es continuar caminando. La acción de caminar decide y el dónde miramos determina la dirección y el espítiru de hacia donde vamos.

Hoy, en esta época en que los líderes del gobierno y las personas que los eligieron, parecen no reconocer los valores básicos de los derechos humanos, yo necesito con desesperación que la esperanza me acompañe. No la esperanza que se sienta esperando que algo suceda, tampoco la esperanza como forma de oración a los demás, sino la  determinación activa de transmitir un mensaje de energía a través de la práctica de mi oficio, del teatro. Un oficio basado en el know-how de crear relaciones.

Los dos últimos Festivales Transit estuvieron impregnados de temas sobre la violencia hacia las mujeres y las posibles formas de reaccionar. La elección de Esperanza en Acción- Teatro, Mujeres, Voluntad- como tema del noveno Transit, viene de una necesidad de seguir adelante. Utilizo “Voluntad” en el doble sentido de resolución y legado. Sin olvidar la necesidad y la responsabilidad de denunciar y reaccionar. Me gustaría recuperar la confianza en la comunicación que rechaza las palabras ociosas y que pasa a través del contacto corporal, la seguridad, el espíritu de aventura y la creencia en el futuro.

Cuanto más envejezco, más experiencia tengo y más IA, algoritmos y robots, asumen la capacidad humana de tener sentimientos e inteligencia, más necesito belleza, poesía, canciones, música, niños, movimiento y naturaleza. La naturaleza tiene el poder de ser que me gustaría darle a mis acciones en el teatro. La naturaleza transmite mensajes de energía y de vida que son una inspiración para mi trabajo.

Cada vez que me enfrento a la desesperación, la enfermedad, la miseria y la rabia, mi consejo ha sido, tomar tiempo para respirar, ir a caminar, estar en la naturaleza, cerca del mar o en el bosque, donde no hay nada mecánico, ordenado, simétrico, aburrido y donde todo está cambiando todo el tiempo. El horizonte puede estar nublado, pero la distancia y el espacio, me dan la proporción y el anhelo.

Preparando la imagen para el festival, Dorthe Kærgaard, me recordó un dicho danés “No debes sentarte dentro, cuando toda la esperanza está afuera”. Muchas mujeres han sido invitadas al Noveno Festival Transit para contribuir con su experiencia de acuerdo a este tema, a través de espectáculos, demostraciones de trabajo, talleres y charlas. El programa quiere llevar a las mujeres “Afuera” para nutrirlas, energetizarlas e inspirarlas, aumentando la sensación de esperanza por el futuro de nuestro oficio y de este mundo, y para la creencia de que en una época de crisis, desilución, corrupción, autocracia y guerra, la voz de las mujeres puede aportar un punto de vista alternativo. Esto requiere compromiso y responsabilidad. Y por supuesto, adentro o afuera, luchando con la desesperación o cantando con dicha, gritando fuerte o en un silencio persistente, nosotras tenemos que hacer bien nuestro trabajo. Esa es la única arma a nuestra disposición. El teatro es un espacio compartido para la reflección, pero también puede ser un momento para la esperanza en acción.

 

Julia Varley