En busca de la isla de nunca jamás

En mayo, he cumplido 50 años de vida profesional, un pedazo de historia que es, prácticamente, casi toda mi vida adulta. Y aun pensando que no haya nada de trascendental que festejar, más allá de estar aún de pie, se me agolpan los pensamientos, retazos de recuerdos; la persistencia de un viaje que, lo veo nuevamente ahora, abraza compacto cuatro momentos que no quisiera fuesen descuidados por la memoria.

De aquella juventud precoz y loca de un Libre Teatro Libre circundado de violencia y terror, a la transhumancia solitaria de un exilio lleno de preguntas y ausencias. De la bruma de un lago casi verde donde inventarse las Raíces de una casa y de otro teatro, a la dignidad de un Magdalena Project que abrazo como si fuera la más altiva de las mujeres, con tanto de cruz y poca redención.

Porque siento que es el mismo viaje, el mismo movimiento, la misma identidad.

Estos son los puentes que aún me unen a una idea de teatro, porque fueron los únicos recursos que, queriendo ir más allá de los principios, de las teorías, de los sistemas, lograron humanizar un oficio.

Ningún espectáculo, por más bello y extraordinario que sea, podrá competir nunca con la intensidad del defender un sueño irrealizable.

Muchas de nosotras fuimos constructoras de ilusiones, de esas que te hacen creer que la vida puede ser mejor de lo que es si tenemos a raya nuestras pequeñeces, o si hacemos un teatro embebido de fatiga y tenacidad o si nos empecinamos en no ceder. Nos hemos aferrado a las ilusiones y las hemos diseminado aún sabiendo que no son más que un horizonte roto o un espejismo.

Pero es posible que la riqueza y la esencia resida proprio en esta fiel quimera, en esta perenne consistencia del efímero, en esta necesidad de encontrarse aunque sea sólo para intercambiar brújulas perdidas.

Porque, se los puedo asegurar, no hay peor cosa para los amantes de la razón, de la sensatez, de la realidad objetiva, que vernos andar, una y más veces, en busca de la isla de nunca jamás.

Cristina Castrillo
Teatro delle Radici
http://teatrodelleradici.net